RESPETA MI IMAGEN, JUZGAME POR MI TRABAJO, MANIFIESTO

Colaboración de Mónica Herreras Rodriguez
Licenciada en Derecho por la Universidad de León

Hoy me he sumado a este manifiesto, que próximamente será presentado al Congreso de los Diputados, dada la importancia de la reivindicación que representa.
El acceso de la mujer a puestos que conllevan visibilidad pública en nuestro país ha supuesto uno de los pasos más importantes de las últimas décadas. La ley de igualdad efectiva de mujeres y hombres de 2007 constituye un gran avance para nuestra sociedad, no obstante, persisten ciertas actitudes que impiden hablar aún de igualdad efectiva.
La imagen de la mujer se presenta más vulnerable y sexualizada que la del hombre en numerosos sectores, sólo hace falta ojear los anuncios publicitarios para entender hasta qué punto se confunde feminidad con frivolidad.
Cobrar el mismo sueldo por el mismo trabajo sigue siendo una de las asignaturas pendientes que padecen muchas españolas. Según la encuesta de estructura salarial, del INE, la diferencia salarial que existe por término medio entre mujeres y hombres es de un 26,3%. Las mayores divergencias entre las ganancias de ambos sexos se encontraron en Aragón y Asturias y las menores en Canarias y Extremadura. La diferencia también es evidente al comparar titulaciones similares: el salario femenino es inferior en un 30% en todos los niveles de estudio, aunque hay más trabajadoras con estudios universitarios que trabajadores.
Según la Federación Española de Mujeres Directivas las cosas empeoran en los escalones altos del organigrama laboral, ya que las retribuciones no son públicas ni se rigen por convenio. Como el nombre del cargo puede variar las diferencias llegan hasta el 40%.
¿Qué podemos hacer ante este problema?, la afectada puede interponer una demanda individual por vulneración del derecho fundamental a la igualdad y no discriminación por razón de sexo del artículo 14 de La Constitución Española, ante el juzgado de lo social. Además es conveniente denunciarlo ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, pues si la inspección constata la discriminación, se habrá cometido una infracción muy grave y se sancionará a la empresa.